¿RRHH Puede Realmente Medir La Cultura de la Empresa?

«Cultura» es una de las palabras más de moda en el lugar de trabajo moderno. La cultura de una empresa puede tener un impacto significativo en toda la organización. Desde la contratación de los mejores talentos hasta la disminución de la rotación del personal, la finalidad es mejorar la productividad global. Cultura, es también un concepto nebuloso que puede resultar difícil de medir o controlar. Afortunadamente, los nuevos servicios y tecnologías de Recursos Humanos están surgiendo para ofrecer maneras de hacer precisamente eso. Uno de esos servicios tecnológicos es CultureIQ, un proveedor de SaaS que ayuda a las empresas de cualquier tamaño a medir, analizar y mejorar su cultura de trabajo. 

«El capital humano es la inversión más grande que la mayoría de las empresas hacen» dice Greg Besner, fundador de CultureIQ. Sin embargo, la mayoría de las empresas no tienen métricas establecidas para evaluar la satisfacción de los empleados, más allá de una encuesta anual de compromiso de los empleados. Dichas encuestas hoy en día se consideran obsoletas. Según Besner, la encuesta anual de satisfacción de los empleados es «demasiado poco, demasiado tarde» para el acelerado ritmo del ambiente laboral de hoy. «Nos hemos dado cuenta de que la encuesta de compromiso sola, no es realmente una medición activa y tiene muchas limitaciones», dice Besner. «La fuerza de trabajo de hoy es más vocal, abierta al cambio y tendrán muchos más puestos de trabajo (movilización) durante su carrera. Si una organización sólo está haciendo encuestas anuales, se está perdiendo de una enorme cantidad de información útil.»

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Así que ¿cómo se mide la cultura en el lugar de trabajo? Besner dice que la comunicación es la clave. Eso significa ponerse en contacto regularmente con los empleados y hacerle preguntas sobre diversos factores de la cultura de la empresa. Una vez recopilada la información, el siguiente paso es aquel de brindarle los resultados a los colaboradores e informarle los cambios que la organización va a realizar acorde con los hallazgos. La idea es no solo recopilar datos, sino compartir los resultados con el personal, cuyas perspectivas son las que realmente le agregan el mayor valor a la entidad. Los empleados se sienten frustrados si están dando retroalimentación, pero no ven cambios. Análisis de Data Lidera el Camino Cuando las empresas utilizan el servicio de CultureIQ, comienzan con una plantilla que mide la satisfacción de los empleados en 10 categorías principales (por ejemplo, el entorno de trabajo, la colaboración, la comunicación, etc.).

Cada categoría incluye una serie de preguntas relacionadas con la satisfacción y el rendimiento de los empleados. Los integrantes del departamento de recursos humanos, que buscan atender unas necesidades en específico, pueden customizar las preguntas dentro de la plantilla. Es una encuesta de satisfacción del empleado que está constantemente evolucionando. Por ende produce un flujo constante de datos para analizar cual provee una imagen general de la cultura de una organización; tal se refleja con una «puntuación cultural». «La medición de la cultura es sólo un paso. También es importante involucrar a los líderes de las organizaciones para poder definir una cultura ideal», dice Besner. «El sistema ofrece análisis “gap” de las deficiencias (puntos de mejora). En otras palabras, la idea no es sólo medir dónde le gustaría estar la institución, sino también hacer un análisis para ver qué cualidades tienen el mayor impacto.» ¿Qué es una Gran Cultura? Actualmente, más de 1.000 empresas utilizan la plataforma  de CultureIQ. Recientemente, CultureIQ se asoció con la revista Entrepreneur para publicar “Las mejores culturas empresariales del 2015”. Dentro de la categoría de empresas grandes, la agencia de mercadeo digital EliteSEM ocupó el primer lugar.

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La revista Entrepreneur le hizo un perfil a EliteSEM y describe la empresa como «construida alrededor de la idea de que los empleados deben ser capaces de determinar sus propios horarios, cargas de trabajo y ser remunerados.» El equilibrio trabajo-vida (“work-life balance) se destaca como una prioridad para la compañía. Sus empleados pueden trabajar desde cualquiera de sus siete oficinas en todo el país, también pueden reducir o aumentar sus horas de trabajo por su propia voluntad. La compensación de los empleados EliteSEM está totalmente relacionada con su desempeño y con la rentabilidad global de la empresa.

¿Eso significa que el enfoque de EliteSEM es adecuado para todas las empresas? Definitivamente no. No hay una “talla única” para todos en a la creación de una gran cultura de la empresa. Cambios superficiales como proporcionar cerveza y aperitivos en la oficina o el tiempo de vacaciones ilimitada, por sí solo no mejorará automáticamente la cultura de una empresa. Sin embargo, estos tipos de cambios pueden contribuir a los valores generales que conducen a gran cultura. «Tenemos tesoro de datos, y todo el mundo está tratando de determinar qué áreas pueden transformar sus negocios.» Besner dice » Un hallazgo interesante que hemos encontrado es: que la compensación no ocupa el primer lugar dentro de la lista de prioridades de los empleados respecto a la cultura empresarial. Nuestros datos indican que lo que tiene el mayor impacto para los colaboradores es el desarrollo profesional y las oportunidades de aprender.”

Por: Charles Coy