Desarrollo de capacidades, no capacitación: el aprendizaje como un reto de cadena de abastecimiento

¿Cómo hacemos para acortar nuestro tiempo de respuesta a la necesidad del desarrollo de capacidades?

¿Podemos hacer esto manteniendo o mejorando la calidad de nuestros entrenamientos y por ende el desempeño de la organización?

¿Será posible acelerar el nivel de experiencia de lo ya aprendido en estos entrenamientos?

¿Podremos mejorar la retención de lo aprendido y utilizar la tecnología como soporte de desempeño en nuestro trabajo?

Uno de los mayores retos que enfrentan las empresas hoy en día, es la escasez  de habilidades técnicas y profesionales que existe en el mercado laboral, no solo en nuestro país, sino a nivel mundial. La competitividad ha llevado a las empresas a acelerar su ritmo de innovación y a adoptar cada vez más las nuevas tendencias, tanto a nivel conceptual respecto a su modelo de negocio, como en las herramientas tecnológicas que estas tendencias demandan a las empresas para poder mantenerse y ser la opción predilecta de sus clientes.

Empresas como Motorola Solutions, Adobe, IBM y Xerox han hecho grandes inversiones en capacitación para que sus equipos de trabajo pasen de ser vendedores de productos, a ser la solución y los expertos de su industria.

La tecnología lleva un ritmo tan acelerado que se estima que de aquí a diez años casi todas las posiciones de trabajo necesitaran un diploma universitario.

 ¿Estarán las empresas dispuestas a esperar el tiempo necesario para que esta necesidad sea suplida quizás en unos 20 a 30 años? ¡No creo!, a las empresas cada día se le hace más imprescindible no solo acortar los tiempos de entrenamientos, sino crear una cadena de abastecimiento de habilidades que les pueda crear un ducto proveedor de habilidades técnicas, profesionales y gerenciales que permitan  sostener y facilitar la ejecución de toda su estrategia de negocio.

 Actualmente Latino América está considerada como una de las regiones en las que más ha estado creciendo el aprendizaje virtual en los últimos años y que mas crecerá en los próximos 5 años con un crecimiento actual de 14.6% e ingresos por un monto de 1.4 billones de dólares en el 2013, se estima que esta cifra sea de 2.2 Billones de dólares para el 2016.

Esto es un indicador de que  Latino América está adoptando la tendencia de educación virtual a la velocidad de la luz lo que nos sitúa en un contexto muy favorable para solucionar algunos de los retos actuales.

Gracias a las herramientas de autoría de eLearning las empresas tienen el poder de crear eLearning y Mobile eLearning en mucho menos tiempo sin perder la calidad de diseño, o instruccional de la capacitación.

Herramientas como SHIFT eLearning de Aura Interactiva, nos brindan la velocidad de plantillas prediseñadas basadas en las mejores prácticas de diseño instruccional y la flexibilidad de adaptar el curso eLearning creado a las necesidades de la empresa.

Por otro lado, las simulaciones nos permiten acelerar el nivel de experiencia de lo ya aprendido. Dejar que los empleados experimenten las consecuencias de cada decisión tomada en base a lo aprendido, nos permite que la toma de decisión no afecte la relación con el cliente, o aún peor, desencadene un riesgo de seguridad o financiero para la empresa.

¿Qué pasa después que ya hemos entrenado nuestro personal y que ha tomado experiencia a través de simulaciones adecuadas a nuestras necesidades? La respuesta suele ser que después de un tiempo, olvidan parte de lo aprendido. Pero ahora la tecnología está de nuestro lado.

Aplicaciones de Performance Support (Soporte de Desempeño), el uso de “Bite Content” (contenido tipo bocado), la realidad aumentada, permiten a los activos de la empresa acceder a los conocimientos adquiridos, justo en el momento que lo necesitan, justo en la medida que lo necesitan.

Es un hecho. En las empresas de hoy en día, la capacitación que se requiere de los empleados va más allá de un diploma que lo acredita como profesional en un área. Por eso estrategias como la experiencia Tin Can basado en suplir el 90% de la necesidad de desarrollo de las empresas según el modelo 70-20-10 ayuda a la empresa evolucionar día a día en la creación de alternativas de capacitación, y con ello, el desarrollo de nuevas capacidades para la satisfacción de los clientes.

Una verdadera cadena de abastecimiento en constante funcionamiento y adaptación. Con las herramientas tecnológicas que contamos y las que están por aparecer, sólo aquellas empresas que abracen este reto obtendrán su lugar entre las más competitivas.

Por: Julio Garcia